PODER Y DOBLE MORAL

POR: CARLOS ALBERTO FRANCO

Las elites gobernantes, aquellas que detentan tanto el poder político como el económico, piensan de una manera y actúan de otra, dependiendo de los intereses en juego, de las posibilidades reales para atacar o defenderse, concertar o confrontar, acordar o controvertir, situaciones todas que les permitan permanecer en el mando, para que otros obedezcan. Estas elites actúan con una buena dosis de hipocresía y, si la reunión es social y en un club de alto turmequé, la opinión o valoración de un adversario político o económico y/o un aliado estratégico, diferirá según los intereses que se encuentren en juego. Siempre ha sido así y seguirá siendo de esa manera, más en una ciudad pequeña como Palmira, en la cual, “estar en la jugada, en el sitio preciso y en el momento oportuno”, es vital para no desaparecer. Analicemos algunos ejemplos representativos, dependiendo si se maneja el poder desde el Estado, o si se hacen mandados a jefes políticos o finalmente si se silencian los lenguajes y las opiniones, para no incurrir en confrontaciones con quienes detentan “la sartén por el mango”.

1). EL ALCALDE Y SU ASESOR JURÍDICO: La línea oficial del motoísmo - el alcalde es un representante fiel a este grupo político -, expresa que Castro González promete cumplir pactos preestablecidos, da las órdenes, pero el asesor jurídico Solís Ovidio no las acata. Castro hace lo que puede, mientras Solís hace lo que quiere. Ambos son abogados. Castro fue asesor jurídico del exalcalde Calle Forero y de Motoa Kuri; a Solís Ovidio lo trajo del norte del Cauca, la exprimera dama Cecilia Solarte de Motoa, existiendo parentesco lejano en el árbol genealógico de ambos. Fue en su momento la cuota de la esposa de un exalcalde y con el tiempo adquirió enorme poder. Basta un ejemplo para saber cómo actúan. En el caso del contrato con GESCOOP, cooperativa de garaje que vinculó al municipio el exalcalde Motoa, Castro González conceptúa que dicho convenio lesivo para el municipio, debe liquidarse; Solís Ovidio como jurídico, aspiró en su momento a una conciliación que resultaba muy atractiva para el contratista, que terminó averiada cuando se allegaron demandas en Fiscalía y Procuraduría, que hacían imposible jurídicamente, la salida propuesta por el asesor jurídico de Castro. Resultado: seguimos los palmiranos en el limbo respecto a ese contrato viciado, Castro sigue “preocupado”, de ahí no pasa y Solís no resuelve nada. “Ordenes de arriba” no permiten resolver en derecho y fiscalmente, un contrato lesivo a las rentas municipales y al tránsito de la ciudad. Todos al final, siguen cobijados por un manto de inoperancia e ineficiencia, que terminamos por pagar 300.000 palmiranos.

2). KURI ES KURI Y SANGUINO ES SANGUINO ¿Y LOS CAICEDO QUÉ? Inmemorialmente los Kuri siempre han sido un clan político muy unido y solidario, orientado por el viejo Antonio Kuri y Américo, su hermano. Con el tiempo Miguel Motoa Kuri, luego de 20 años en el Congreso de la República, accede a la alcaldía de Palmira y en remolque, un tiempo después, lleva a Eduardo Sanguino Soto a la Cámara de Representantes, pariente político este último, del primero. Hasta aquí todo ha marchado armónicamente. Pero como “coca cola mata tinto”, sale Sanguino del congreso en 2006 y, llega el hijo de Motoa Kuri a remplazarlo. “A rey muerto, rey puesto”.

Ya en el 2007 hay conflictos de familia: Sanguino Soto aspiraría a la alcaldía de Palmira o, en su defecto, espera que su hijo Sanguino Kuri la conquiste para bien del kurilato. El problema radica en que Motoa Kuri, que tiene problemas serios para llegar a la Gobernación del Valle, tendría en mente y bien diseñado su “plan B”: si no logra aglutinar respaldos para la Gobernación, la alcaldía de Palmira sería su destino final. Un clásico conflicto de intereses, ya que Motoa Kuri debe ser generoso con el hijo de Sanguino Soto, y dar luz verde a su aspiración a la alcaldía de Palmira. Difícil que Sanguino Kuri logre este último propósito, pues Motoa prefiere “pájaro en mano a cientos volando”. Si su hijo Motoa Solarte actualmente es Representante a la Cámara ¿por qué Motoa Kuri debe contentarse con pasar a los cuarteles de invierno?

Mientras los Kuri resuelven tamaño problema, la casa política de los Caicedo Zamorano se debate en parecidas circunstancias. Tienen cuatro candidatos a alcalde: Moncayo, Ortega Samboní, Chávez y Arboleda. Mientras Chávez tiene el beneplácito de la senadora Dilian Francisca, Arboleda concita más a la unidad caicedista en la ciudad. ¿Que podría suceder? Que si Motoa va con sus aspiraciones por su lado y los Caicedo con la propia, el partido Liberal y el Polo Democrático podrían llegar a la alcaldía, siempre y cuando su candidato de unidad fuera excelente y el programa de gobierno conjunto sea atractivo, innovador, incluyente y participativo.

Mis lectores disculparán que estas verdades de a puño, puedan ser interpretadas como simples “chismes políticos”. Nada más lejos de la verdad. Los poderosos poseen un lenguaje críptico que los mortales comunes debemos estar prestos a interpretar. Lo único que no podemos perder de vista es que, en caso de que el poder se encuentre en peligro de perderse, caciques y gamonales hagan alianzas hasta con el diablo, con tal de permanecer en lo alto de la pirámide y manejar a su amaño los enormes recursos públicos, perpetuándose y heredando a sus familias, los gajes y prebendas de quienes están acostumbrados a mandar.

¿Seguirán los palmiranos “comiendo cuento”, de que los mismos con las mismas harán la revolución que pide el pueblo?


francodemalatesta@yahoo.com


Enero 8 de 2007