LA ESTACIÓN DE TRANSFERENCIA: UN BUEN NEGOCIO.

LA ESTACIÓN DE TRANSFERENCIA: UN BUEN NEGOCIO

GOTAS DE O2.
POR: MANUEL FERNANDO MUÑOZ BENJUMEA.
manferoz@gmail.com; www.manferoz.blogspot.com
Julio 10 de 2008

El municipio de Cali ha planteado, junto con la CVC y la empresa INTERASEO la construcción de una estación de transferencia de residuos sólidos en el corregimiento de Palmaseca, en Palmira. La entidad regional ambiental ordenó el cierre definitivo del basuro de Navarro y EMSIRVA lo trasladó a Yotoco en donde, con todos los elementos técnicos y tecnológicos, se está disponiendo de las basuras que recoge en Cali. Para hacer viable económicamente este proyecto, y buscando eficiencia y economía en el transporte de esos residuos, se ha planeado la construcción de una estación de transferencia, que ha generado inmensas críticas, controversias y opiniones a favor y en contra, entre los habitantes de Palmaseca, los corregimientos vecinos, especialmente de Rozo, la dirección de la Aeronáutica Civil - que vigila la operación del aeropuerto de Internacional de Palmaseca - y la ciudadanía del área urbana municipal; algunas posiciones son por desconocimiento del proyecto y del asunto; otras son políticas y otras son de oportunidad para alcanzar una segregación territorial, pero todas van en contra de la Administración Municipal.

Una estación de transferencia no es un relleno sanitario. Son dos asuntos muy diferentes. En una estación de transferencia se “transfieren” las basuras del vehículo que las recoge de los usuarios y compacta en su recorrido por la ciudad, a un vehículo mucho más grande del tipo tractomulas - igual a los que transportan caña en los ingenios -, acondicionados sus remolques para evitar el derrame de los lixiviados sobre el piso de las carreteras. Esta labor se hace dentro de una edificación cubierta y dotada técnicamente de los elementos necesarios para controlar los olores y las emanaciones producidas por los carros recolectores y compactadores de basuras (grandes ventiladores que limpian el aire). Tampoco en las rampas de transferencia se depositan basuras sobre el suelo. Se cumplen además otras labores en la operación de ese proceso de transferencia, como la desodorización y olorización de los vehículos que salen cargados de residuos hacia el relleno sanitario. Esas basuras, no duran más de 15 minutos dentro de la estación de transferencia. Los líquidos producidos por el lavado de los recolectores y los tractomulas, son acopiados en un depósito especialmente diseñado, que posteriormente es desocupado para llevar, en vehículo, a una planta de tratamiento de aguas residuales. No existe entonces posibilidad alguna que alrededor de esa estación, se puedan aposentar ni los recicladores ni los gallinazos. El aeropuerto Enrique Olaya Herrera de Medellín, aún en operación, está ubicado a menos de 12 Km. de la estación de Sabaneta.

Otra asunto, es el sitio en dónde se debe ubicar la estación de transferencia. La actual está planteada inicialmente, construirse en la intersección de las carreteras Palmaseca - Rozo y Aeropuerto – Cencar, proyecto que ha generado múltiples opiniones entre los pobladores de la zona, especialmente por que demasiados vehículos transitarían por sus vías y que el derrame de lixiviados los afectaría. Si los carros están debidamente construidos, esto no sería posible. Pero en gracia de evitar un aumento del tránsito de esos vehículos por la vía Recta Palmira-Cali, Rozo, es posible que la estación de transferencia se pueda construir en otro sitio. El lugar podría ser sobre la margen de la nueva carretera que va desde el puente del río Guachal, Zona Franca del Pacífico, hacia el puente del Paso de la Torre. Seguramente en ese sector no se generaría ningún impacto negativo el tránsito de los vehículos recolectores sobre las vías atrás detalladas; estos carros transitarían por la autopista Cali – Yumbo y tomarían la vía al aeropuerto, desviándose a la izquierda sobre el río Guachal, para llegar al sitio en el que se construya dicha estación. Los vehículos tipo tractomulas saldrían de la estación por la vía Paso La Torre - La Acequia - El Cerrito - Buga- Yotoco, sin pasar por los centros poblados de Palmaseca y Rozo, tampoco de La Torre. Solo pasaría por el corregimiento de La Acequia. Valdría la pena que INTERASEO, CVC, EMSIRVA y las autoridades del municipio de Palmira concertaran esta nueva ubicación, previo estudio de factibilidad.


Este es un negocio para quienes invierten, obvio; quien invierte dinero debe tener utilidades; pero también es una necesidad sentida para las comunidades no solo de Cali, sino también en el futuro para los palmiranos. El solo hecho de acortar las distancias del transporte de los carros recolectores de basuras hacia un relleno sanitario, debe traducirse en rebajas en la facturación por recolección, transporte y disposición final de basuras. Para finalizar, existe una directiva presidencial, expedida en mayo de este año y la cual comentaremos próximamente, en la que el gobierno nacional del presidente Uribe, sale al paso a quienes buscan oponerse a la instalación de estas obras en cualquier lugar del país. Ahí el doctor Uribe, manifiesta que no deben existir trabas a estos procesos de desarrollo, lo que colocará la discusión en Palmira más álgida, con los vecinos de Rozo y Palmaseca. Donde manda capitán, no manda marinero.

Por otro lado, llamo la atención de los vecinos de Palmaseca para que analicen de fondo y con cabeza fría, por qué razón los paisanos roceños han tomado suyo oponerse radicalmente a la construcción de la estación de transferencia en su territorio. Puede ser que quieran confrontarlos con la Administración Municipal y unirlos al proceso segregacionista que han iniciado para ser municipio, conociendo todos que Palmaseca es corregimiento más importante que Rozo por los importantes ingresos tributarios que producen quienes han instalado sus empresas en sus alrededores y el potencial que tiene para el desarrollo económico de la región, es el corazón del eje de la poligonal La Dolores, Aeropuerto, Cencar, La Dolores. Los roceños los necesitan para, a través de los impuestos que producirían, propiciar el desarrollo que requiere la cabecera urbana de Rozo, tributos que solo alcanzarían para ellos y que seguramente volverían mucho más pobres al corregimiento de Palmaseca.

La Administración Municipal, con su alcalde a la cabeza, debe negociar con EMSIRVA e INTERASEO excelentes beneficios renovables para el corregimiento de Palmaseca y el municipio en general; no solo empleo, también es alcanzar recursos para inversión en educación, salud, vías, ambiental, etc. Esto es una industria, y Palmira y Palmaseca del mismo modo tienen que ganar con esta inversión.